Seguimos trabajando los personajes, y os propongo una receta para historias que tienen al personaje como punto de partida (en lugar de la trama).
Os propongo esta receta:
- Inventa el nombre para tu personaje. Debe ser un nombre que te atraiga, aunque no sepas por qué.
- Imagina cómo es físicamente.
- Imagina sus rasgos psicológicos.
- Hazle preguntas y escucha sus respuestas. ¿A qué teme sobre todas las cosas? ¿Qué hace cuando nadie le ve? ¿Qué soñó anoche?
- Esas preguntas te ayudarán a definirlo. Añade y elimina rasgos hasta que tengas un personaje interesante al que conozcas bien.
- Crea una historia a paritr de lo que es (sus contradicciones, miedos, anhelos...).